La granalla de acero inoxidable se usa ampliamente en muchos campos debido a sus propiedades únicas y su amplia aplicabilidad.
En primer lugar, la granalla de acero inoxidable tiene excelentes propiedades como alta dureza, alta resistencia al desgaste y resistencia a la corrosión. Estas propiedades lo hacen excelente en el tratamiento de superficies metálicas y pueden mejorar eficazmente el acabado y la dureza de la superficie metálica al tiempo que reducen el riesgo de desgaste y corrosión.
En segundo lugar, la baja densidad y buena fluidez de la granalla de acero inoxidable le permiten cubrir uniformemente la superficie de la pieza de trabajo durante el granallado, logrando un tratamiento superficial eficiente y uniforme.
Además, los pellets de acero inoxidable son respetuosos con el medio ambiente y no contaminan, y cumplen con los requisitos de la industria moderna en materia de protección del medio ambiente y desarrollo sostenible. Por lo tanto, la granalla de acero inoxidable se ha utilizado ampliamente en el procesamiento de metales, la fabricación de maquinaria, la construcción naval y otros campos.
Los abrasivos metálicos, como la granalla de acero, la granalla cortada con alambre de acero, etc., tienen una dureza y resistencia al desgaste extremadamente altas.
Los abrasivos para metales tienen excelentes propiedades de corte y pueden eliminar material de la superficie de la pieza de trabajo de manera rápida y uniforme.
Apto para uso en la industria procesadora de alimentos.
Durante su uso, los abrasivos metálicos se pueden reciclar, tamizar y reutilizar muchas veces debido a su alta dureza y resistencia al desgaste.
Los abrasivos metálicos pueden mantener un rendimiento estable a altas temperaturas y no son propensos a deformarse o fallar.
Los abrasivos metálicos están hechos principalmente de materiales reciclables, no producen sustancias nocivas durante su uso y cumplen con los requisitos de protección ambiental.
Tiene una excelente resistencia al desgaste. Esto significa que pueden mantener resultados de molienda estables durante largos períodos de uso y reducir la pérdida de eficiencia del procesamiento causada por el desgaste abrasivo.
Tiene mejor resistencia a la corrosión. Puede resistir la erosión de productos químicos como ácidos y álcalis y mantener el rendimiento y la forma del abrasivo, extendiendo así su vida útil.
Los abrasivos no metálicos se pueden reciclar y reutilizar, lo que reduce el desperdicio de recursos y la contaminación ambiental.
Los abrasivos no metálicos vienen en una variedad de tipos y especificaciones, adecuados para diferentes necesidades de procesamiento.
Los abrasivos no metálicos tienen velocidades de molienda más rápidas y tasas de eliminación más altas, lo que ayuda a mejorar la eficiencia del procesamiento.
Los abrasivos no metálicos pueden adaptarse a diferentes entornos y condiciones de procesamiento, como altas temperaturas, alta presión, humedad y otros entornos hostiles.